Eucaristía en memoria agradecida por los profesionales de salud Y por los fallecidos del COVID-19
PANAMÁ. 26 DE ABRIL DE 2020. “Esta acción de gracias a Dios que ofrecemos, es especialmente por todos los hombres y mujeres profesionales de salud que arriesgan su vida para ayudarnos en este momento de pandemia del coronavirus, por su entrega en los hospitales y en las casas” y “también hacemos memoria agradecida por todos nuestros fieles difuntos y por los que han fallecido en este tiempo de pandemia, expresó el Arzobispo de Panamá en la Eucaristía del tercer domingo de Pascua, realizada en el Seminario Mayor San José.
Monseñor José Domingo Ulloa Mendieta, agradeció a todos los profesionales de salud, “cimiento en el que se sostienen nuestra fragilidad”, con un testimonio de compromiso y amor al prójimo en medio de la crisis sanitaria que vive el mundo y Panamá.
Añadió, son los profesionales de la salud: médicos, especialistas, enfermeras, enfermeros, auxiliares, camilleros, laboratoristas, tecnólogos médicos, personal de emergencia y, de aseo, celadores, farmacéuticos, administrativos, y demás personal, que sin descanso están atendiendo a quienes se ven afectados por el coronavirus.
Damos gracias a Dios por contar con profesionales que están llenos de humanidad, solidaridad y amor al prójimo, entre los cuales está el personal sanitario que ocupa un lugar prevalente, dijo.
El Obispo panameño señaló que con la llegada del coronavirus más que paralizarlos les ha avivado su vocación de servicio, amor y cuidado a la vida humana; ellos tienen la capacidad de ser pan que se parte y se reparte.
Mientras a nosotros nos exhortan a quedarnos en casa, ustedes profesionales de la Salud, cada día están viviendo en primera fila la situación, exponiendo no solo su salud sino la de sus familiares dejando la piel por los pacientes, priorizando su atención frente a sus necesidades familiares, personales y profesionales, indicó.
Hoy, más que nunca, ustedes han demostrado que son hermanos en el dolor, en la enfermedad y en la muerte. Son hermanos aún en nuestras propias miserias, hermanos, aún en el miedo”, recalcó monseñor Ulloa.
Tristemente tenemos que decirlo que este esfuerzo no pareciera nada cuando hemos conocido que en algunos lugares se ha llegado a aislar al médico a los enfermeros, al personal del equipo de salud porque al cuidar pacientes me pueden contagiar”; recalca monseñor Ulloa, que otra ves el miedo y pensar solo en mí, hace relucir en nosotros la peor parte, la confianza en Jesucristo nos libera del miedo consientes de que la verdad nos hará libres.
El Arzobispo de Panamá, señala que ellos son “as manos amigas”, que disimulando su propia tristeza sacan sus mejores sonrisas, para animar a los enfermos; también hemos constatado que donde no puede llegar un ministro ordenado, un sacerdote, muchos médicos y enfermeras ejercen su sacerdocio bautismal. Son los que despiden de este mundo a los que fallecen lejos de sus familiares tratando de darles paz en el último suspiro de su vida.
También monseñor Ulloa, convocó a los feligreses para que desde sus casas realizar una Liturgia de vida en un duelo sin entierro y poder elevar esta memoria agradecida con aquellos familiares que han fallecido a causa de la pandemia.
Uno de estos dramas que estamos viviendo es cómo fallecen nuestros seres queridos lejos de nosotros, sin poderlos ver, y mucho menos estar en ese momento del transe a la otra vida. Frente a ello el dolor se profundiza más, cuando no podemos darle el entierro como acostumbramos y como nos invita la Misericordia, no podemos olvidarlos, no hay un adiós más doloroso que no poder despedir de este mundo a la persona que amamos, recalcó el Obispo metropolitano.
La sanación de estos deudos, víctimas también del Covid-19, por hacer un homenaje social por todos aquellos que han fallecido, porque cada muerto es una persona que ha dado lo mejor de si este país, indicó el Obispo.
Al concluir la Homilía el Arzobispo de Panamá, pidió a los feligreses que frente a la fotografía de su seres queridos que han fallecido en medio de esta cuarentena encender una vela y usar la imaginación y escuchar la carta que desde el Cielo nos envían nuestros seres queridos que ha partido de este mundo.
Quizás te interese
Arzobispo de Panamá destaca la conexión histórica entre Sevilla y Panamá en el Congreso de Hermandades
diciembre 12, 2024
Primer sorteo de Rifa de la Campaña Arquidiocesana
diciembre 12, 2024