El gran error, es no conocer las normas establecidas por la C.E.P. y la Arquidiócesis
PANAMÁ. 7 DE SEPTIEMBRE DE 2020. “En esta semana, se ha señalado que en un templo histórico donde se realizó un funeral, se violaron las normas de bioseguridad, lo que es totalmente falso. La Iglesia Arquidiocesana aún pudiendo abrir los Templos con muchos meses de anterioridad, responsablemente los mantuvo cerrados por el incremento de los casos del COVID-19”; aclaró el Arzobispo de Panamá Monseñor José Domingo Ulloa Mendieta, durante la celebración dominical realizada en la Catedral Basílica Santa María la Antigua.
Reafirmó qué, luego del anuncio de las autoridades que los casos levemente habían ido disminuyendo, se decidió abrir los Templos según las circunstancias de cada parroquia, dándole la libertad de decidir de abrir al párroco y al equipo parroquial de higiene y salud COVID-19 que debe tener cada templo para garantizar una participación segura.
Monseñor José Domingo Ulloa Mendieta, dijo además que otro gran error, fue no conocer las normas establecidas por la Conferencia Episcopal Panameña y de la Arquidiócesis de Panamá, en cuanto a funerales y el rito de la colocación de las cenizas en una cripta.
Aprovechó para destacar, que hay criterios de bioseguridad que permiten un funeral en estos nuevos tiempos de un aforo hasta el 25% de la capacidad del Templo, en otros la cantidad es menor según las circunstancias donde se celebra un funeral. En cuanto al rito para colocar las cenizas en la cripta señaló que solo es entre cinco u ocho personas como máximo por el espacio de ese lugar.
“Tenemos, especialmente en las redes sociales, los hacedores de problemas y los inquisidores de todo el mundo, son los que se creen los impolutos que pueden estar a la caza de la menor equivocación o sospecha del otro para caer como aves carroñeras a destruir la integridad o la reputación de cualquier persona”, indicó Mons. Ulloa.
También, expresó que la verdad es lo que menos interesa para ellos, incluso en el caso de abordar temas de la Iglesia los especialistas en todo, son aquellos que no se informan con propiedad, poniendo en evidencia, su ignorancia en temas eclesiales, realmente es tan cierto el dicho “ que la ignorancia es osada”.
Panamá no puede construirse fomentando un ambiente tóxico y de confrontación. Hay mecanismos serios para la crítica constructiva y para las denuncias formales, manifestó el Arzobispo de Panamá
