Catorce Seminaristas realizaron su misión de Semana Santa 2022 en Chimán y el Archipiélago de las Perlas
Catorce seminaristas realizaron su misión de Semana Santa 2022, en las zonas misioneras de Chimán y el Archipiélago de las Perlas, que comprende las comunidades de Unión Santeña, El Hato y Las Islas de San Miguel, como parte de su formación, desde el 10 de abril Domingo de Ramos hasta el 17 de abril Domingo de Resurrección.
Los futuros sacerdotes realizaron su misión Evangelizadora junto al Pbro. Luis Núñez, rector del Seminario Mayor San José de Panamá, el P. Israel Ramos, párroco de San Miguel Centro y los diáconos Nelson Magallón y Román Altamiranda.
De acuerdo con el Pbro. Luis Núñez, “‘Juntos como Compañeros de Camino’, con la disponibilidad de vivir la alegría de Cristo Resucitado, en la zona misionera de Chimán y el Archipiélago de las Perlas, llevamos a cabo Eucaristías todos los días, visitas a los enfermos y las familias casa por casa, se oró y se trabajó con los miembros de la comunidad, se desarrollaron procesiones, se impartió el Sacramento del Bautismo y se confesó a niños, jóvenes y adultos”.
Experiencia de misión
Para el diácono Nelson Magallón, señala “poder compartir la fe en la comunidad El Hato, fue una experiencia muy bonita porque son un pueblo alegre y con mucha sed de Dios”.
“Esas áreas apartadas de la Arquidiócesis, necesitan un fuerte impulso misionero urgente, debemos unirnos para no desatenderlas. Ahí que salir al encuentro de estos hermanos de las periferias existenciales, quienes ante la ausencia de la Iglesia Católica, para llenar sus vacíos espirituales, participan de los cultos de otras denominaciones religiosas”, señaló Magallón.
Según nos cuenta el seminarista Carlos Bárcenas, la comunidad Unión Santeña, ubicada en el corregimiento de Chiman, “a pesar de ser un lugar tradicionalmente católico, con el paso de los años han ido perdiendo su identidad cristiana, por el poco acompañamiento espiritual que se le da por ser una zona de difícil acceso y la proliferación de otras denominaciones cristianas.
¡Es un verdadero reto mantener la fe en este pequeño pueblito apartado, que cuenta con una Iglesia Católica y cuatro templos! Comenta Bárcenas, fue una buena misión para nosotros los seminaristas como para la comunidad, porque nos ayuda a darnos cuenta de la gran escasez de agentes de Pastoral que existe en estos sitios de difícil acceso de la Arquidiócesis, no solo de sacerdotes, sino que de diáconos, religiosos, religiosas y laicos que estén dispuestos a ir a llevar la palabra de Dios y animar en la fe y promover el desarrollo integral de la persona humana.
“Realizar esta misión en la Unión Santeña, me anima y ayuda más en mi formación y preparación al sacerdocio, por si algún día Dios me pide apoyar en alguna de las periferias de la Iglesia y de nuestra sociedad, estar prácticamente capacitado”, dijo el seminarista Carlos Bárcenas.
Quizás te interese
Arzobispo Ulloa compartió un almuerzo con 12 personas que viven en situación de calle
noviembre 20, 2024
