Reinaugurada la Capilla del Arzobispado de Panamá
Con la participación de los colaboradores y de los miembros de las direcciones del Comité Organizador Local de la JMJ, se reinaugurada la capilla del arzobispado de Panamá, que estará abierta permanentemente.
El arzobispo metropolitano, monseñor José Domingo Ulloa Mendieta, al presidir la celebración eucarística, destacó lo especial de la nueva capilla del Arzobispado: su Sagrario tiene una reliquia de San Clemente I; frente a la mesa de este Altar, rezo el Papa San Juan Pablo II, cuando llegó a la Nunciatura de Panamá, por lo que recogen muchas historias.
Monseñor Ulloa agradeció a la Nunciatura “este Sagrario y este Altar que gentilmente nos ha regalado. Destacó que la capilla no basta construirla sino que hay que dedicarla al ‘Altísimo’ con un acto litúrgico”; agregó que hay que dar gracias a Dios por la oportunidad de realizar la consagración del sitio más importante del arzobispado, que en estos últimos meses hacia falta a todos la presencia de Jesús.
“La construcción de esta capilla nos invita a cada uno, desde sus posiciones de trabajo, a ir descubriendo ¿cuál es nuestro trabajo? y ¿cómo podemos dar respuesta –ya sea con rostro extendido o alegre e ilusionado, al servicio que realizamos como parte de la misión del reino de Dios”, recalcó.
De acuerdo con el arzobispo, en cada templo se encuentra escrita la historia de todos los hombres, las familias y las personas que pertenecen a las comunidades y a las parroquias; por eso advirtió que no podemos olvidar que el templo es un lugar de recuerdo pero también al mismo tiempo es un lugar de esperanza.
También señaló que el templo físico para los católicos es mucho más que un lugar de reuniones, es la puerta para entrar al cielo, casa de Dios, un lugar donde nos encontramos con el Señor y con el hermano.
“Que la capilla sea un lugar donde depositemos nuestra historia personal; para dar gracias por los gozos, las esperanzas, las tristezas y las preocupaciones que cada uno trae cada día; sabemos que Dios no es ajeno a cuanto dolor, cuantos gozos y cuantas lágrimas sean depositados a sus pies”, explicó.
