Primera Feria Intergeneracional rumbo a la JMJ

“Los adultos mayores  son signo de sabiduría; y tenemos el compromiso de legar nuestro testimonio de sabiduría a quienes son nuestro relevo generacional: los jóvenes y los niños”, expresó el Arzobispo de Panamá Monseñor José Domingo Ulloa Mendieta, en la Primera Feria Intergeneracional JMJ Panamá 2019, que se realizó en la Universidad Latina el pasado sábado 29 de septiembre.

En medio de un ambiente festivo, se congregaron adultos mayores y jóvenes para compartir en esta feria, donde el Arzobispo Ulloa Mendieta, recordó que el Papa Francisco exhortó a las jóvenes del mundo al concluir la JMJ en Cracovia en el 2016, a prepararse de la mano de sus abuelos y de los adultos mayores en su camino a la Jornada en Panamá.

Citando al Papa Francisco, el Arzobispo Ulloa dijo: “Para preparar la JMJ 2019,  los jóvenes tienen como reto hablar con sus abuelos y si ellos han partido al cielo deben realizarlos con los ancianos; porque ellos son la memoria histórica de un pueblo y el punto de referencia para nuestra juventud y la niñez”.

Para el Arzobispo de Panamá, resulta importante y bueno estos espacios de encuentro, sin distinción de credo o fe, donde el punto en común es “ir rescatando el respeto a las personas mayores”, lo que realmente hace grande a una nación  y  a un pueblo.
“Un pueblo avanza, no porque tenga grandes edificios o porque tenga un gran economía; una nación es grande cuando tienen una gran cultura y cuando todas las miradas están en nuestros ancianos quienes la han forjado”.
Recalcó que  estos encuentros Intergeneracionales no solo se realizan por la JMJ, sino porque estamos convencidos de que el presente y el futuro de Panamá no se puede hacer al margen de nuestros sabios.

La Dra. Argénida de Barrios,  coordinadora de este Encuentro Intergeneracional, insistió en la necesidad  de  buscar el entendimiento entre generaciones y no visibilizarnos por la edad. Advirtió que la pirámide poblacional está inversa y el mundo está envejeciendo como en Europa, Asía; y Panamá es el cuarto país en envejecimiento poblacional de América Latina y el Caribe.

“Queremos dejarle toda nuestra  siembra a la juventud que convive en este país para, además entiendan que deben forjar su camino con una buena salud física, mental y espiritual”, afirmó.

Francisco y sus abuelas.