Mensaje a los Educadores
Hacemos un alto en el servicio diario para hacer un reconocimiento al verdadero educador de mi patria.
Celebramos el día del maestro panameño el 1 de diciembre, por Decreto Ejecutivo del 14 de noviembre de 1958, con el objeto de reconocer al “instaurador de la educación pública en Panamá”: don Manuel José Hurtado, en su natalicio; decreto que también propone estimular el reconocimiento público de la labor de los educadores panameños.
Hoy, en el marco de la preparación de la Jornada Mundial de la Juventud 2019, reconocemos que la juventud es la esencia del trabajo del educador. Nos disponemos a dar gracias a Dios por la oportunidad que da a los hijos de este pueblo, de darle gloria por la realización de esta Jornada. La fuerza joven del mundo estará representada en nuestro país.
El educador panameño, motor junto con la familia, de la formación de los panameños, resalta su labor, más que nunca como guía de juventudes.
Como el Maestro Jesús, el educador panameño se convierte en verdadero pedagogo; en formador en la fe; en testimonio de su compromiso como cristiano, cuando toma en cuenta la situación especial que presentan sus estudiantes; cuando no pone límites entre el currículo y la vida, porque uno es parte de la otra; cuando tiene amor como base de su trabajo; cuando es testigo de su fe en la escuela.
Educar es, en sí mismo, un acto de esperanza, como dice Papa Francisco, no solo porque se educa para construir un futuro, apostando a él, sino porque el hecho mismo de educar está atravesado por ella.
En nombre de esa esperanza, saludamos hoy a los educadores panameños.
Pastoral Educativa de la Arquidiócesis de Panamá
1 de diciembre de 2017
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