Líderes dispuestos a evangelizar a las jóvenes generaciones
PANAMÁ, 8 DE SEPTIEMBRE DE 2019. La Catedral Basílica Santa María la Antigua fue la sede para que unos 150 jóvenes que participaron de la Asamblea de Pastoral Juvenil Arquidiocesana, llegaran con el corazón rebosante de gratitud, para traer ante el altar del Señor los frutos de su trabajo, del vivo debate y el intercambio de experiencias que les permitió profundizar la realidad juvenil panameña, iluminados por la exhortación post sinodal Cristo Vive, esperanza nuestra”, expresó el Arzobispo de Panamá, monseñor José Domingo Ulloa Mendieta.
Monseñor Ulloa destacó con esta asamblea se ha querido reanimar en los responsables de pastoral juvenil esa “dulce y confortante alegría de evangelizar” a las jóvenes generaciones de nuestro Panamá.
Al referirse al “ser cristiano” anotó que es una llamada a crecer como persona, a madurar, a ser responsable, a vivir en libertad, a tomar nuestras propias decisiones, a arriesgar. Añadió que Jesús nos invita a vivir así el don de la libertad, a liberarnos de todas las ataduras que nos esclavizan.
Hizo un llamado a cargar nuestra cruz, que significa aceptar nuestras heridas y limitaciones, nuestros errores del pasado. No negarlas sino asumir que son parte de nuestra historia, de nuestro ser; y caminar con la mirada puesta al frente, confiando en que Dios curará todas esas heridas, recalcó.
Oración por Venezuela
Al coincidir con la fiesta de Nuestra Señora de Coromoto, patrona de Venezuela, monseñor Ulloa pidió la intercesión de la Virgen para que en “este hermano país cese la negligencia y la discordia; para que los gobernantes que no escuchan la voz de su pueblo, sean sensatos y busquen los caminos del diálogo y la paz”.
“Como hermanos en la fe y hermanados por esta hermosa tierra del continente americano, estaremos unidos permanentemente en oración con los hermanos y hermanas venezolanos hasta que lograr que se cambien el régimen que desea perpetuarse en el poder”, apuntó.
Los migrantes
Al referirse a los migrantes explicó que “son nuestro hermanos” por eso pidió que “volquemos nuestro entusiasmo y solidaridad” hacia ellos, porque al recibirles con alegría, tienen mucho que aportar a los países y al mundo en general.
La acción significativa de nuestra Iglesia Arquidiocesana, en este mes estará dirigida a apoyar al Hogar Luisa y a los privados de libertad, a quienes se pueden apoyar con enseres de aseo personal y productos en general, concluyó.
Campaña Arquidiocesana
También el arzobispo Ulloa, recordó que el próximo domingo 16 de septiembre, la Ola Naranja, volverá a nuestros hogares a recoger las alcancías de la Campaña Arquidiocesana, y animó a ser corresponsables con la Iglesia, porque cada aporte dado con alegría redunda en su vida, como una gran bendición.
Todo bautizado es corresponsable con la sostenibilidad de las obras sociales y de evangelización de su Iglesia, recaló Arzobispo de Panamá.
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