Arzobispo Ulloa compartió un almuerzo con 12 personas que viven en situación de calle
Durante la Misa celebrada el 17 de noviembre de 2024, en el marco de la Jornada Mundial de los Pobres, el Arzobispo de Panamá, monseñor José Domingo Ulloa Mendieta recordó que no puede existir un cristianismo auténtico sin una opción preferencial por los pobres.
En sus palabras, destacó que “los pobres se identifican con Cristo y lo hacen presente en este mundo, especialmente para su Iglesia”.
El Arzobispo Ulloa subrayó la importancia de acoger en nuestros corazones el llamado del evangelio de Mateo (25,40): “Conmigo lo hicisteis”, y recordó las palabras de San Pablo VI en 1968: “Toda la tradición de la Iglesia reconoce en los pobres el sacramento de Cristo”.
Señaló que los pobres son la imagen sagrada de Jesús con rostro humano y que en ellos se revela la eminente dignidad que nuestra fe cristiana les confiere.
“Esta Jornada y Domingo de los Pobres deben ser un momento de gracia y esperanza, una oportunidad para descubrir a Cristo en los pobres, con quienes Él se identifica plenamente”, afirmó. También añadió que, hoy más que nunca, los pobres son la “ventana abierta” por la que la Iglesia y toda persona de buena voluntad deben asomarse para responder al llamado de Dios.
Monseñor Ulloa enfatizó que unirnos a los pobres en oración —orar con ellos, por ellos y a través de ellos— nos permite elevar nuestra espiritualidad y reconocer la presencia viva de Cristo en quienes más sufren.
La jornada culminó con un almuerzo con los participantes de la asamblea pastoral arquidiocesana, donde el Arzobispo compartió la mesa con 12 personas que viven en situación de calle, en un gesto de solidaridad y cercanía, quienes son acompañados por el Centro Integral San Juan Pablo II, cuya labora reafirma el compromiso de la Iglesia con los más necesitados.
Panamá, 18 de noviembre de 2024.
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