Mons. Ulloa: “Don Bosco sigue presente y nos ilumina en ese camino de creer en la juventud”
PANAMÁ. 1 DE FEBRERO DE 2021. “Señor en tu providencia nos has dado a Juan Bosco padre y maestro de la juventud que bajo la guía de la Virgen María trabajó con entrega infatigable por el bien de la Iglesia; suscita también en nosotros la misma caridad apostólica que nos impulse a buscar la salvación de los hermanos”, expresó el Arzobispo de Panamá, en la celebración de la solemnidad de San Juan Bosco.
Monseñor José Domingo Ulloa Mendieta, en su homilía señaló, ‘podemos decir Panamá es de Don Bosco y Don Bosco es de Panamá’. La Liturgia dominical de este IV domingo Ordinario, coincide con la fiesta de Don Bosco y nos presenta una gran enseñanza ‘no es lo mismo tener poder que tener autoridad’.
En la vida diaria todos sabemos que la autoridad es necesaria, alguien debe llevar el timón de la barca, el volante de un automóvil o el de algún grupo concreto, pero también todos los días experimentamos que cuando el poder de uno se vuelve contra los demás oprime y cuarta la libertad o impide el debate sosegado y la propuesta diferente, dijo.
Hoy desgraciadamente abunda mucha palabrería, charlatanes en el mercado de la sociedad, que gritan su mercancía e imponen a los demás sus ideas y su poder recalcó Monseñor Ulloa, mientras que Jesús y Don Bosco convencen a tanta gente porque hablan no de memoria sino de corazón, con sinceridad sintiendo lo que dicen, siendo fiel a Dios que los inspira.
Debemos acompañar la Palabra como Jesús, con obras concretas, que muestren el amor de Dios, solo así podremos hablar con autoridad; a todos de alguna manera nos toca ser educadores ya sea en la familia, en la escuela, en la Iglesia o en la comunidad, reafirmó Monseñor Ulloa, pero la pregunta es ¿cómo enseñamos? ¿qué autoridad tenemos cuando hablamos?
En esta fiesta de Don Bosco se nos revela nuevamente una gran verdad, los jóvenes hoy más que nunca necesitan de maestros que transmitan un mensaje valido, que no sea solo palabras, sino que vaya acompañado del testimonio de nuestra vida, solo así podremos enseñarles con autoridad, indicó el Arzobispo.
Don Bosco respondió como Jesús con amor y con dulzura acompañando a los jóvenes, se enfrenta al mal no condenando al pecador sino liberándolo del mal, respondiendo con ternura y coraje a los influjos de un mundo violento que desechaba a los jóvenes que creía sin futuro, manifestó.
En la época de Don Bosco se había perdido la fe en los juventud, reafirmó Monseñor Ulloa, hoy mas que nunca Don Bosco sigue presente y nos ilumina en ese camino de creer en la juventud, porque aquellos jóvenes que por alguna razón estaban en la calle, excluidos de las periferias o como los de la cultura del desecho, por eso podemos decir que fue un hombre visionario.
Aplicó lo que el Papa Francisco nos invita en la actualidad, ser una Iglesia en salida, a no tener miedo, a ir contra corriente; Monseñor Ulloa Mendieta, recalcó que Don Bosco salió en busca de jóvenes abandonados a la suerte de la calle pero confiando su misión a Jesucristo y a María Auxiliadora.
Si logramos visualizar el espíritu vivido por Don Bosco, se preguntaran indicó Monseñor Ulloa ¿qué están ofreciendo los padres a sus hijos?, ¿que estamos ofreciendo como sociedad a la juventud?, ¿que programa y que políticas estamos implementando para hacer de un Panamá mejor donde existan espacios para el desarrollo integral, intelectual, humano, cultural y espiritual de la niñez y la juventud?.
Don Ángel Fernández Artime, rector Mayor de los Salesianos, en su mensaje a los fieles devotos panameños les exhortó, “después de la espectacular JMJ quisiera presentar la figura de Don Bosco como la esperanza que nos debe mover a seguir al Señor Jesús, que llegue a sus corazones, que toque sus vidas y la de sus seres queridos, deseándoles una hermosa fiesta, aunque no sea posible ver esa hermosísima procesión.
“Lo importante es que llegamos a compartir con los demás, lleguemos al corazón de otras personas, a ser mediación y ternura de Dios para otros, no perdamos la autentica y profunda esperanza porque nuestro Padre camina con nosotros en el camino de la vida siempre a nuestro lado y en los momentos de dificultad”, expresó el Rector Mayor.
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