Iglesia quiere ser cirineo para ayudar a cargar la cruz de la gente en la calle
Panamá. 22 de abril de 2019. Un emotivo Viacrucis con gente que vive en la calle fue presidido por el arzobispo de Panamá, José Domingo Ulloa Mendieta, a quienes les expresó que “Si hay un día en que no podemos sentirnos abandonados por Dios es precisamente en el Viernes Santo, porque Dios no es ajeno al dolor de cada uno de ustedes”.
Este Viernes Santo, recalcó, “el amor de Jesús se entrega totalmente. Es desfigurado por nuestros pecados para luego darnos la salvación con su Resurrección. Podemos decir que el dolor, el sufrimiento y la muerte han sido vencidos por Jesucristo”.
Para el arzobispo es claro que “La Iglesia quiere ser el cirineo para ayudar a cargar la situación de cruz de la gente de la calle, para que sientan que el dolor de Jesús es el mismo de cada uno de ustedes”.
Fue impresionante como cada una de las estaciones del Viacrucis fue realizada en los lugares donde se da la prostitución, la drogadicción, duermen las personas sin hogar, los migrantes, etc. Los protagonistas de cada reflexión del Viacrucis fueron precisamente la gente en situación de calle, que imploraban a Jesús que los perdonara y les ayudará a superar sus cruces.
Este Viacrucis fue organizado por el Centro de Orientación y Atención Integral San Juan Pablo II, ubicado en la Calle 32 Este, casa 472, de la ciudad capital, en la que desde tempranas horas de la mañana se atendieron a la gente de la calle (adictos a las drogas, trabajadoras sexuales y personas con otra situación de desamparo) ofreciéndoles corte de cabello, duchas, cambio de ropa, entrega de útiles de aseo, alimentación.
El Director del Centro, Ariel López, señaló que la cruz es la manifestación más clara del amor de Dios por nosotros y nos llama a acercarnos al hermano, por ello el objetivo de la institución es ser el cirineo acompañarles y ayudarlos a cargar su cruz para que dejen las calles, el casino, las drogas y la prostitución.
