El Panamá vive momentos de transformación que exigen la participación de todos

“La Iglesia Católica, en el mundo y en Panamá, ha sido históricamente promotora y actora principal en la búsqueda de caminos de consenso ante los conflictos porque, como Madre, maestra, hermana y samaritana, no puede ser indiferente ante el dolor, las luchas y la confrontación que sufren sus hijos”, precisó el Arzobispo monseñor José Domingo Ulloa, reiterando “el país vive momentos de transformación que exigen la participación de todos: de nuestras comunidades de fe, así como de los empresarios, sindicalistas, educadores, políticos, la academia, de todos sin exclusión de nadie. 

 

Durante la homilía dominical, Monseñor Ulloa Mendieta, dijo “asumimos el llamado para ser facilitadores con el compromiso y la voluntad de contribuir a la paz social, lo que se alcanza superando las causas estructurales de la situación actual, que sabemos es consecuencia de un arrastre, porque no hemos dado respuesta a la inequidad, la exclusión social y la corrupción en la que incurrimos todos”. 

 

Ninguno de nosotros puede jugar a ser espectador, creyendo que desde nuestro rincón particular estamos a salvo de las lecciones de la Historia, señaló el obispo José Ulloa, en su llamado, “vivimos una encrucijada nacional, y a cada cual le corresponde asumir su cuota de responsabilidad tanto en las causas, como de las consecuencias, y en buscar colectivamente el bien común”. 

 

Sabemos y respetamos las posiciones encontradas sobre el rol de la Iglesia Católica en este proceso, unos preocupados en que sea instrumentalizada y, otros pocos, cuestionando nuestra participación, recalcó. 

  

La sinodalidad no es teoría, es praxis. Y la Iglesia está en ese proceso que estamos viviendo hoy en Panamá, haciendo una escucha atenta, de escucharnos unos a otros, aunque no nos guste lo que nos dicen, ni lo que tenemos que decir. Una experiencia viva y profunda de caminar juntos, a pesar de nuestras diferencias y contradicciones, señaló el Arzobispo José Ulloa. 

Comparte

La Arquidiócesis de Panamá creada el 9 de septiembre de 1513 es la Iglesia más antigua en tierra firme y madre de las Iglesias particulares existentes hasta ahora en la república de Panamá.