Familia Claretiana inicia preparativos del centenario de los primeros claretianos en el país
La familia claretiana inició los preparativos del centenario de la llegada de la primera comunidad de frailes misioneros San Antonio María Claret a Panamá, un 22 de agosto de 1923; con una Misa presidida por el arzobispo Mons. José Domingo Ulloa Mendieta, en el Santuario Nacional, celebración en la que fue muy claro al decir “conmemorar cien años es celebrar la fuerza manifestada de Dios en la debilidad de tantas comunidades que han ido conociendo a Cristo, pero sobre todo, se han ido comprometiendo a través del amor en la construcción de su reino, sirviendo a la comunidad cristiana de distintas maneras”.
Tanto a los Frailes como a la familia claretiana de la parroquia del Sagrado Corazón Inmaculado de María, Mons. José Ulloa Mendieta, les exhorta “que este centenario les permita a todos hacer un alto, sin deshacernos de la riqueza ni de la raíz de nuestra historia, nos toca a todos, mirar atrás para ser agradecidos, si, pero pensando en el presente y poniendo las bases para el futuro”.
El arzobispo Ulloa, pide que la preparación del centenario ayude a todos reavivar la pasión por este santo, que sé vivir la gracia de ser una comunidad misionera, que puedan atender a la pastoral juvenil y vocacional, escuchar el clamor de los pobres por la justicia, que se comprometan a cuidar la Casa Común y sobre todo ayuden a adaptar las estructuras apostólicas a la realidad y a los retos del mundo de hoy.
En la Iglesia nadie está para calentar asientos, todos tenemos algo que hacer y en esto Claret, es un gran maestro, “a todos el Señor nos llama a hacer algo, pero no todos servimos para todo, pero si todos servimos para algo”, explicar Mons. Ulloa, porque muchas veces en la Iglesia existe gente que quiere hacerlo todo, son como pulpos, no les dejan espacio a nadie.
Sin darse cuenta aquella semilla sembrada un 22 agosto de 1923, hay ido creciendo y multiplicando en nuestro país, indicó Mons. Ulloa.
